Quemar libros sólo sirve para caldear el ambiente.
Las ideas no se calcinan, se propagan y difunden con las
cenizas.
He
troquelado las ochocientas páginas de
“La interpretación de los sueños”
de Sigmund Freud, en mariposas, que vuelan con las alas repletas de palabras.
He
recortado cientos de nubes cargadas
de textos, y estrellas que
brillan en la noche oscura de papel, que velan nuestros sueños.
La
cultura es inquebrantable, se crea, se transforma, pero no se destruye.
La
fórmula de la cultura es igual a mariposas por estrellas, dividido entre nubes,
elevado al cuadrado de los sueños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario